El nuevo municipio no sólo ocupa un importante lugar en siembra de frutillo, pues en el 2020, el pepino persa que se cultiva en la zona, arrojó una producción de 27 mil toneladas.
SAN QUINTÍN, Baja California. Además de frutillos y vid, en los campos agrícolas de San Quintín también se cultiva el pepino persa, producto que en el 2020 arrojó una producción de 27 mil 800 toneladas, así lo dio a conocer la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural en Baja California (Sader).
Juan Manuel Martínez Núñez, representante de la dependencia, explicó que el año pasado, en los campos agrícolas de los municipios de Tecate, Tijuana, Playas de Rosarito y Ensenada, se sembraron un total de 340 hectáreas con pepino persa, principalmente.
Derrama Económica
Comentó que el 90 por ciento de la superficie se estableció con la variedad persa, mientras que el restante 10 por ciento de la superficie se sembró con la variedad Slice More, que a diferencia del persa, es mucho más grande y con un aspecto más liso.
El funcionario precisó que dicha producción dejó una derrama económica de alrededor de 320 millones de pesos, ello, de acuerdo a la información proporcionada por el Ingeniero Fernando Sánchez Galicia, jefe del distrito de desarrollo rural.
80% Se Exporta
Las zonas mayormente productoras de pepino son San Quintín; Ojos Negros, Maneadero y el Valle de la Trinidad, en donde anualmente, se generan alrededor de 115 mil siembras que le dan empleo a la población de las zonas rurales de Ensenada y a trabajadores de otros Estados de la República Mexicana.
Martínez Núñez agregó que el 80 por ciento de la producción es destinada a los mercados internacionales, específicamente, Estados Unidos. El resto de la producción se comercializa en algunos estados de la República Mexicana, sobresaliendo la Ciudad de México, Jalisco y Nuevo León.
Por último, agregó “que en la zona costa de Baja California hay un padrón de 42 productores que se esfuerzan por modernizar sus unidades de producción y sistemas de siembra a través de la implementación de nuevas tecnologías que les permitan abaratar sus costos de producción, incrementar sus rendimientos y lograr mayores niveles de rentabilidad económica”.
Fuente:
Jorge Perzabal. El Vigía.